martes, julio 29, 2008

Desnudos...

Desnudos con el corazon al aire,
te observo mientras te alejas de mi,
desnuda por fuera,
desquiciada adentro
y mi orgasmo extraviado en ti.

Desnudos mientras nos buscamos,
dejamos la lava que vuelve para cubrirnos,
con su manto perenne,
con su fuego amargo
y mi piel hecha girones en ti.

Desnudos recogiendo retazos,
declaras la ausencia de color en tu vida,
trazo tu figura, con tinta indeleble
y mi pincel se desliza en ti.

Desnudos pronunciando tu nombre,
trato de unirlo al mio para fusionarlo,
que sea nuestro estandarte, aun sin aire
y mi bandera derive en ti.

Desnudos me acerco a ti para tocarte,
bajo la luna aprecio el calor de tu cuerpo,
que me provoca consumirme, quemarme en el
y bailar al ritmo de tus llamas.

Nos desnudamos tanto,
que la oscuridad no me impide escudriñarte,
dibujar tus adentros, escuchar la historia amarga de tu piel,
pues solo el amor sabe como llegar tan hondo.

Nos desnudamos tanto, que nos reinventamos
al ritmo de nuestros cuerpos, bajo la batuta
acelerada de nuestros corazones,
pues solo ellos tenian la rienda.

Dejame desnudarte, dejame acercarme a tu corazon
dejame vagar por tu sangre, conocer sus pasiones
sin molestarla mientras navego en sus corrientes.

martes, julio 01, 2008

Rastro de cordura...

...Que se evade bajo la subyugante mirada que domina desde lo profundo del bosque de esos ojos que me observan.

Cordura que ha dejado de estar conmigo desde el momento mismo que me detuve hechizado de tu aroma.

Aquel rastro que me abandono cuando, presa de tus caderas, solo pude ser mero espectador del paraiso que se ofrecia para mi.

Esta noche mi mente esta omnibulada, poseida por el estupor propio de una noche de lluvia torrencial, que cae sobre nosotros, que lava los pecados y purifica nuestra alma.

Esta noche que me recuerda que la cordura la he perdido hace algun tiempo, que con ella se fue algo de mi anterior yo, pero que con su huida, da pie a que se comience a formar el nuevo.

Todo es tan ambiguo y tan extraño cuando del amor se trata, que solo puedo dar gracias a Dios por llevarse el rastro de cordura que quedaba en mi mente, pues asi la locura que se desencadena en mi corazon no tiene ya ataduras.

Dejo la sangre derramada por viejos amores, que se vaya al diablo con todo y la cordura.

Dejo los miedos que los mismos provocaban. Saltare sin red, bajare por las cascadas de mi pasion, que sea ella quien me lleve a donde tenga que llegar.

Mi dulce locura...
Mi hermosa princesa.